ATENCIÓN

ATENCIÓN: la percepción requiere participación

viernes, 18 de febrero de 2011

SUPERFICIALIDAD

Tenía unos pechos bonitos, grandes y perfectos. Y su cuerpo era precioso, casi increíble, todo lleno de curvas vertiginosas. Lo peor era que ella lo sabía, y tal vez por eso se embutía en esos vestiditos que se pegaban a su torso y casi se convertían en su segunda piel. Vestiditos que desafiaban el fin originario de su creador, vestir y ocultar, e insinuaban y mostraban las lindezas de esta diosa. Por eso cuando me eligió a mi de entre toda la chusma que babeaba por sus huesos me sentí tocado por la pluma del ala de un ángel. Sin embargo, al llegar el invierno, y con él el frío, ella se fue escondiendo, capa a capa, en abrigos y prendas cada vez mas gruesas. Sus formas se habían perdido. Y de pronto sentí que no podía mantener con ella ni una sola conversación interesante. No tuve mas remedio que despedirme de ella... hasta el verano siguiente. Aunque también rezo porque este año venga una primavera calurosa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario