ATENCIÓN

ATENCIÓN: la percepción requiere participación

jueves, 2 de septiembre de 2010

ALZHEIMER

Mi anciano padre me mira a los ojos. Descubre en ellos al niño que fui. Llora.

Una enfermedad fulminante y degenerativa ataca el cerebro de mi padre y le impide recordar los episodios más recientes de su vida. Sin embargo aún está lo suficientemente lucido como para ser capaz de reproducir conversaciones enteras que ocurrieron hace tiempo. Aún no ha olvidado la alineación de su equipo de fútbol de cuando era un adolescente. A veces confunde a la enfermera con mi madre, ya que esta, cuando era joven y conoció a mi padre era también profesional sanitaria y es cierto que ambas se dan un aire. Es capaz de recordar juegos, precios de artículos, nombres de personas ya fallecidas, y algunas situaciones que ocurrieron en el pasado como el día de su boda, su estancia en el cuartelillo haciendo la mili o cuando me molía a palos con sus manos de maltratador. Hay cosas que aún no ha olvidado. Y por eso me mira a los ojos, descubre en ellos al niño que fui y llora arrepentido, sin recordar que ya le perdoné por ello y que llevábamos una temporada recuperando el tiempo que el odio nos impidió disfrutar.

5 comentarios:

  1. El hijo lo perdonó, pero el autor parece que no. Es normal que sus personajes (del autor) a veces se rebelen.

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  2. El autor no toma partido. No perdona ni condena, solo cuenta la historia. Ni tan siquiera cuando habla en primera persona, porque es el personaje quien habla, en primera persona. Y el que los personajes se rebelen... dios, me encanta!!!

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  3. Por qué el personaje perdona? Será q necesita quitarse culpas antes de q su padre muera? Por mas q su padre esté en su lecho de muerte o tenga una enfermedad incurable, el pasado no puede cambiarse...

    (creo q necesito volver a terapia...) jaja

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  4. wow... en teoría era mucho más sencillo que todo esto... menos mal que el cuento no es autobiográfico, que si no la que se hubiera montado... jijijijijiji

    El cuento versaba sobre el perdón ante un corazón verdaderamente arrepentido... pero los relatos no los hace solo el que lo escribe, sino también el que lo lee... así que quizás el narrador sea también un poco culpable, o en realidad necesite examinar sus sentimientos de nuevo, porque puede ser que dentro suyo exista algo que él confundió con el perdón... podría ser...

    definitivamente tal vez necesite terapia también... en casa del herrero...

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